O3zone: del brillo al cuidado

El uso del ozono en el campo médico se remonta al siglo pasado; sin embargo, el uso de la molécula siempre se ha realizado de forma empírica hasta hace 20 años cuando, gracias a la investigación traslacional, comenzamos a estudiar y comprender sus mecanismos de acción en el campo biológico.

Los resultados de esta investigación han permitido identificar un amplio abanico de indicaciones terapéuticas en el ámbito humano y animal.

En los últimos años, en la Universidad de Medicina y Farmacia de Génova, en colaboración con el equipo capitaneado por el Prof. Izzotti, la investigación traslacional, transpuesta al campo clínico, ha permitido desarrollar una mezcla de aceites vegetales que estabilizan el ozono, hacen está disponible en el tratamiento de la patología vascular isquémica y como un poderoso adyuvante en oncología.